Sin embargo, estos datos de Ustea, el sindicato que aglutina a los interinos no docentes y que ganó las últimas elecciones sindicales en los servicios centrales de la Junta, no casan con los ofrecidos por la Administración autonómica.

En concreto, la consejera de Justicia y Administración Pública, María José López, aseguró el pasado día 15 de marzo que alrededor de un 60 por ciento de interinos lograron plaza fija con la convocatoria de 2002.

La consejera también apuntó que una vez se resuelvan las convocatorias de 2003 y 2005, la Junta sólo tendrá un 5 o 10 por ciento de interinidad.

Según Ustea, "con las mejores previsiones siempre quedará un 30 por ciento de interinos en la misma situación actual, esto es, alrededor de 700 personas", explica Manuel Moreno, portavoz del sindicato.

A su juicio, la Consejería debería garantizar la estabilidad laboral a los interinos mayores de 55 años, como se ha hecho en el ámbito sanitario.

Moreno también denuncia que se está produciendo una "funcionarización encubierta" de personal laboral fijo de la Junta, "dado el gran número de ellas que han logrado una plaza", y que el sistema no es una "oportunidad real" para la consolidación del empleo.

¿Sistema de acceso y funcionarización al servicio del interés público o del interés privado?

 "Se prima en exceso la formación, de ahí que haya academias que se estén enriqueciendo con la venta de cursos", critica el sindicalista, quien considera insuficiente que la experiencia represente un 45 por ciento de la nota total.

Para sindicatos como el de Funcionarios de Andalucía (SAF), en cambio, la valoración de la experiencia es excesiva, de ahí que haya llevado a los tribunales varias concursos oposición por primar a los interinos.

Ver artículo publicado en el diario digital DiariodeCadiz.com.