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| Despido de interinas embarazadas: Cascada de discriminaciones. |
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Las consejerías de educación, de las diferentes comunidades autónomas, han heredado en su momento las transferencias en educación. La herencia ha sido mucho mayor que unas simples competencias en la materia. También se traspasaba en bloque toda una estructura organizativa y humana, con unos hábitos y costumbres en la materia de personal, que se siguieron aplicando en las nuevas administraciones educativas, en muchos casos con los mismos vicios y errores que se aplicaban en el MEC. Vicios y errores que muchas veces se amplificaban cuando muchos responsables han pasado de ser "cola de ratón" (cuando estaban en la periferia del MEC), a ser "cabeza de león", en la consejería de turno, y sintiéndose con un mayor margen de discrecionalidad en sus actuaciones. Esto explica el porqué en todas las comunidades autónomas, casi coordinadamente se trata a los interinos de educación de forma discriminatoria, hasta extremos que serían impensables en otras consejerías de la misma comunidad autónoma.Sirva como ejemplo, la aberrante situación jurídica de despedir todos los años a los interinos que habían sido contratados para ocupar una vacante. Despedidos después de estar un año trabajando en un puesto vacante, y sin que esa vacante se haya cubierto, es decir sin que desaparezca la causa por la que se le ha contratado. Esta situación no se da en ninguna otra consejería, simplemente por que va contra la norma. Podemos preguntarnos, ¿Qué hay en común para que todas las comunidades autónomas se hayan puesto de acuerdo en tratar de forma discriminatoria a los funcionarios interinos de educación, y de forma diferente a como tratan al resto de sus funcionarios interinos?. Pues sencillamente que todas las comunidades autónomas han recibido/heredado esa estructura organizativa, personal y forma de actuar de MEC, o sea como dice el refrán "mismos perros con diferente collar". La situación a llegado casi al esperpento, cuando una consejería decide despedir a unas trabajadoras, en situación de riesgo durante el embarazo, alegando "mala fe".¿? Más o menos, siguiendo la información del diario 20 minutos, la cronología de las actuaciones sería la siguiente (2):
La situación no es nueva, ya que se habría producido también en los años 1999 y 2000, llegando el asunto hasta el tribunal constitucional, que desautorizó a la administración educativa y a los tribunales inferiores que le habían dado la razón. (1). Más inexplicable es la cerrazón, en el trato diferente y discriminatorio a las embarazadas, alegando la consejería que las dos sentencias de 1999 y 2000 le autorizaban a actuar de esta manera, cuando como parte condenada sabían desde el año 2001 que el Tribunal Constitucional le había desautorizado por actuar con una "motivación torpe, o con abierta vulneración de derechos fundamentales".(6) Así nos encontramos con lo que la mayoría coinciden en calificar como una serie de discriminaciones en cascada. Se les discrimina por ser mujeres, por estar embarazadas, por estar en situación de riesgo, por ejercer el derecho a la protección de su propia salud y de sus hijos no nacidos, y por ser funcionarias interinas (Que sepamos no se ha despedido ni expedientado por actuar de mala fe a ninguna otra funcionaria embarazada, solo a las interinas). La situación es tan evidente y dura que inmediatamente ha saltado a todos los medios, llegando IU a pedir una sanción ejemplar para educación por incumplir la ley con las funcionarias interinas (3). Y como comentábamos al principio, al saltar el asunto a los medios, las reacciones de las administraciones han sido distintas según de dónde provengan desde la consejería de educación, o desde otro ámbito. Desde educación se justificaban las actuaciones de unos delegados, que decían que su decisión se "enmarcaba en la lucha de la delegación contra "la picaresca, el engaño o la mala fe"" (4), mientras en las reacciones procedentes de otros ámbitos podemos mencionar que IU pedía una sanción ejemplar para educación, la secretaría de organización del PSOE en Andalucía mostraba su malestar y oposición a esta forma de actuar y la junta de personal docente, junto con los sindicatos CGT y SADI, critican el despido de las interinas embarazadas.(5) (¿Y el resto de sindicatos? ¿Se les oiría tan poco si la administración presupusiese engaño y mala fe, al resto de funcionarias embarazadas no interinas, que están en situación de riesgo durante el embarazo?). Al final tiene que intervenir el propio Presidente de la Junta de Andalucía, que obliga a rectificar a la Consejería de Educación, al mismo tiempo que reconoce que se ha cometido un "error grave por parte de la junta", y dirigiéndose a las profesoras interinas despedidas por estar embarazadas decía "Les pido disculpas como presidente y en nombre del Gobierno"" (7). Pero en la consejería siguen enrocados, y a pesar de rectificar obligados por el presidente del Gobierno Andaluz y el resto de presiones recibidas, leemos que continúan justificando su actuación, alegando que habían procedido al despido por desconocer que las funcionarias interinas estaban en situación de riesgo por embarazo (4) (a pesar de ser despedidas después de haber sido citadas y entrevistadas por la inspección médica educativa), y pensar que la baja medica lo era por "enfermedades comunes" (8). ¿Significa esto que un funcionario, no puede contraer una "enfermedad común", so pena de ser despedido si es interino?. La situación aún es más preocupante, al leer en FASE CGT, que el responsable de estas decisiones "se jacta en la prensa de haber ahorrado dinero a la Junta, cesando a funcionarios interinos que estaban de baja por enfermedad".(9) En el trasfondo tenemos unos usos y costumbres, heredados del MEC por las diferentes administraciones educativas, que muchas veces se fundamentan en el dar por supuesto que los funcionarios interinos no tienen los mismos derechos sociales y laborales que el resto de funcionarios, y menos aún que el personal laboral. En realidad, dan por hecho que no tienen o no deben tener ninguno de esos derechos, y sí todas sus obligaciones, situación que debe ser corregida inmediatamente por las diferentes consejerías de educación. Todos los funcionarios, docentes o no docentes, tenemos nuestra parte de responsabilidad en el mantenimiento de esta cultura de la discriminación clasista, que al final terminará por perjudicar a los derechos de todos los funcionarios, sean interinos o de carrera, terminando por actualizarse en nosotros las palabras del Reverendo Martin Niemöller en 1945 :
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