Año horrible... el de algunos


Soy un interino y creo que mi único pecado es haber cumplido todos los requisitos necesarios para ser incluido en una lista de Educación. De la misma manera que otros muchos interinos, no decliné la oferta en cuanto la consellería me ofreció una sustitucion (estaría tonto, tengo mujer e hijos). Este año he tenido la suerte de que la sustitución que me ofrecieron fue larga y en mi ciudad (por primera vez en cinco cursos). He tenido que hacer la evaluación de un Ciclo Superior Formativo cuatro días después de la presentación de la oposición. No he estado de baja y he cumplido con el deber de todo profesor titular (o incluso mejor). Me he presentado a otras oposiciones y me ha pasado lo que dicen algunas personas, encontrarme con algunos interinos que creo que tienen preferencia sobre mí (ya que han estado ocupando, como si fueran titulares, una plaza para la que se suponen que sirven... si no no los habrían llamado). En fin, los que se quejan de las oposiciones de este año tendrían que estar enfadados con la Administración, no con nosotros.


Carta al director publicada en el diario El Progreso
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